A pròposit del darrer post, acabo de recordar un poema estrany i estremidor de Leopoldo Maria Panero.
EL LAMENTO DEL VAMPIRO
Vosotros, todos vosotros, toda
esa carne que en la calle se apila, sois
para mí alimento
todos esos ojos
cubiertos de legañas, como de quien no acaba
jamás de despertar, como
mirando sin ver o bien sólo por sed
de la absurda sanción de otra mirada,
todos vosotros
sois para mí alimento, y el espanto
profundo de tener como espejo
único esos ojos de vidrio, esa niebla
en que se cruzan los muertos, ese
es el precio que pago por mis alimentos.
Leopoldo María Panero
Agujero llamado Nevermore
(selección poética 1968-1992).
Edición de Jenaro Talens.
Ediciones Cátedra, Madrid, 1992.